Acné causas y cuidados

Causas del acné

Son múltiples las causas que originan el acné, entre ellas tenemos:

- Factores genéticos: los hijos de padres que sufrieron acné severo son más propensos a sufrir de acné.

- Tipos de piel: Hay tipos de piel más propensos a sufrir acné, especialmente durante la adolescencia. Por lo general las personas con pieles grasas suelen sufrir más el acné.

- Alimentación: Una alimentación inadecuada y/o desequilibrada aumenta el acné de forma directa.

- Algunos cosméticos, sobre todo las pomadas o aquellos que son muy grasosos pueden empeorar el acné.

- Medicamentos como los esteroides (cortisona), vitamina B, litio, algunos antiepilépticos entre otros, pueden inducir a la aparición del acné.

- Enfermedades endocrinas, como la hiperplasia adrenal congénita, el síndrome de ovario poliquístico e hiperinsulinismo, entre otras, pueden inducir al desarrollo de acné.

Casos más frecuentes de acné severo:

Acné conglobata: Se localiza en tronco, raíz de los miembros y glúteos. Es de larga duración y aparece en general luego de la juventud. Deja cicatrices y responde a la isotretinoína por vía oral recetada por un dermatólogo.

Acné fulminans: Predomina en varones adolescentes con acné leve o moderado en rostro y espalda. Deja cicatrices. Responde a los corticoides recetado por un especialista dermatólogo.

En estos casos severos de acné se pedirá la derivación de un dermatólogo para poder realizar el tratamiento cosmiátrico. 

  Medidas higiénicas:

­ Debe evitarse la manipulación de granos y comedones con dedos y uñas, ya que ello constituye un riesgo de sobreinfección y puede conducir al agravamiento de las lesiones, incrementando la posibilidad de aparición de cicatrices permanentes. Higienizar dos veces por día la piel afectada de la cara, el torso. Generalmente se indica higienizar con una emulsión de limpieza para cutis graso o acnéico y luego aplicar alguna solución tópica con agentes astringentes o seborreguladores. ­

 Los varones que presentan acné deberían evitar el afeitado eléctrico y decantarse por el uso de la cuchilla de afeitar. Para el afeitado debe ablandarse siempre la barba con agua tibia antes de aplicar la crema de afeitar. Para evitar que se produzcan cortes sobre los granitos, el afeitado debe ser lo más suave posible, únicamente cuando sea necesario y siempre utilizando una hoja de afeitar afilada.

­ En cuanto a los cosméticos, deben escogerse aquellos que no sean grasos y que no contengan sustancias comedogénicas (manteca de cacao, derivados de lanolina, etc). El maquillaje tiene que ser eliminado todas las noches con emulsión de limpieza para pieles grasas luego aplicar una loción refrescante. Para el día una loción para el acné coloreada con el mismo tono de la piel y que contenga peróxido de benzoilo o ácido salicílico puede ocultar las imperfecciones de la piel sin riesgos. Los polvos mezclados con un producto no graso también resultan efectivos para cubrir el rostro.

2) Cambio dietético: Reduciendo los alimentos que tienden a provocar reacciones cutáneas en personas jóvenes. Los alimentos que deben prohibirse son: el chocolate y las fresas, pero hay que advertir que como dijimos anteriormente, la alimentación es sólo uno de los factores que interactúa con otros.

3) Productos cosméticos: No usar ningún producto de cosmetología que no contenga en su envase la leyenda "Indicado para pieles acnéicas o seborreicas", ya que en ciertas cremas cosméticas hay determinados componentes grasos que pueden condicionar la producción de más áreas de acné.

4) Adoptar como principio, no usar cosméticos denominados “normales”: aquellos que por el uso y las costumbres son aconsejados entre las amistades y familiares.

5) Tratamiento del acné específico:

La multicausalidad en el acné y el rol que tienen los cambios hormonales durante la pubertad, tornan dificultoso cualquier intento terapéutico que elija el médico dermatólogo, ya que sea cual fuere, la mejoría se observa a través del tiempo. Muchas veces sucede que cuando se comienza un tratamiento antiacnéico, al principio el paciente siente que agravada su dermopatía, por eso esta situación debe ser advertida por el profesional tratante para evitar la deserción del paciente, especialmente cuando se trata de un adolescente. Los productos que se aplican para estas curas tienen que desarrollar como mínimo estas funciones:

  1.     Función descamante: parecida a la que tienen un "peeling" moderado (función llamada también "queratolítica" moderada), gracias a la cual el conducto por donde tendría que circular la grasa elaborada por la glándula queda libre de obstrucción y tiene salida. Esta actividad produce una ligera irritación en la piel. Esta observación es muy importante, ya como se ha comprobado que la mayoría de los productos utilizados para el tratamiento del acné, tienen un efecto revulsivo y producen una acción irritativa de la epidermis, los profesionales que los prescriben deben advertir a sus pacientes sobre los efectos indeseables colaterales. Los componentes más eficaces, al margen del tratamiento que pueda recetar el dermatólogo, son los siguientes:

·         Ácido salicílico

·         Tea tree oil  ha sido designado como el antiséptico más adecuado para el cuidado de las pieles acnéicas debido a su seguridad y efectividad, en remplazo del peróxido de benzoilo y del ácido retinoico, los cuales no están permitidos en este tipo de formulaciones y sólo puedes utilizarse bajo prescripción médica. Es el componente ideal en el tratamiento de pieles con acné, comedogénicas, con "barritos". Sus componentes combinan en un solo producto varias acciones a la vez. Por un lado, su potencia antibacteriana y antifúngica; por otro lado, su excelente disposición para el control de irritación, picazón, tanto sobre la piel como sobre las mucosas. Se usa sobre forúnculos y abscesos.  Su acción calmante  ha tenido suceso usándose en formulaciones para quemaduras y en picaduras de insectos. No daña los tejidos sanos y promueve la cicatrización.

·          ácido glicólico, a concentraciones moderadas

·         microgránulos exfoliantes que forman parte de líquidos limpiadores

2. Función antimicrobiana: destinada a reducir los diversos microorganismos que proliferan y llenan el folículo acnéico. Se usan sobre todo los siguientes componentes:
• peróxido de benzoil a dosis moderadas
• cloruro de benzalconio
• ácido azelaico, a concentración moderada
• lactato de etilo
• exposición moderada, y sólo ocasional, al sol, porque las radiaciones son antimicrobianas.
Pero ATENCIÓN: una exposición prolongada durante horas o repetida en días sucesivos tiene el peligro de que la superficie de la piel engorde por el hecho de acumular queratinas, y que éstas bloqueen los folículos sebáceos y agraven el proceso del acné, además de poder generar máculas (manchas) sobre la piel.

PEELING (SECUELAS DE ACNÉ):

Como su nombre lo indica, las secuelas de acné son fruto de una patología generalmente de la adolescencia que deja marcas en la cara permanentes en el tiempo.

Por medio de una técnica de peeling o pulido pueden tratarse dichas secuelas otorgando un aspecto natural a la piel facial.

Inconvenientes

En tratamientos superficiales, la recuperación es totalmente compatible con la reincorporación inmediata a las actividades sociolaborales. Realizando en forma particular la aplicación de algún producto dermocosmético específico y protección solar.

Es conveniente realizar este procedimiento en otoño-invierno cuando el sol es menos agresivo con la piel.

Si bien es ambulatorio y el paciente puede permanecer unos días en su domicilio realizando los cuidados que se le indiquen, el asesoramiento y control de una cosmiátra puede ser de gran utilidad.